Facebook enfrenta actualmente la crisis más grande de sus 14 años de vida: en menos de una semana cuatro denuncias por parte de sus propios accionistas a raíz de la filtración de información privada de sus usuarios obtenida por la consultora política Cambridge Analytica.
El ex empleado de la consultora, Christopher Wylie, confesó ante diversos medios de comunicación que estuvo involucrado en la apropiación de más de 50 millones de perfiles de usuarios con el propósito de generar perfiles psicológicos del electorado estadounidense en el 2016. La pregunta recabe en ¿Cómo consiguieron obtener estos datos que supuestamente Facebook protege y mantiene en confidencialidad?
Si alguna vez realizaste los famosos test de “¿A qué famoso te pareces?” o ¿Cómo te ven tus contactos según tu perfil? Pudiste ser víctima de una de las mayores y peores filtraciones de datos que ha vivido la famosa red social. Todo fue gracias a la ayuda solicitada al académico Aleksander Kogan, quien creo una de los cientos de encuestas aparentemente inofensivas que circulan por la red llamada “This is your Digital Life”. Esta consistía en un test de personalidad que preguntaba a los usuarios si son extrovertidos o introvertidos, si les gusta o no el arte, si suelen preocuparse en su día a día, entre otras simples preguntas cuyas respuestas eran de suma utilidad para realizar una microsegmentación de audiencias a fin de dirigirles mensajes políticos personalizados para la campaña presidencial del de ese entonces candidato Donald Trump.
¿A cuántas personas afectó este incidente?
Cerca de 270 mil personas realizaron el test, dando acceso a su información personal y a la de sus amigos. Si bien la aplicación de Kogan pudo llegar directamente a esta cantidad de personas, fue a partir de todos los amigos de los primeros que la cifra se acrecentó y alcanzó a más de 80 millones de usuarios.
¿Qué se descubrió en las investigaciones?
En una investigación emitida por el periódico británico The Guardian se manifestó que la compañía había tenido conocimiento de esta violación de seguridad tres años atrás; es decir, desde el 2015; sin embargo, no tomó las medidas necesarias para denunciar y/o asegurarse que esta información no sea utilizada para cualquier tipo de fin.
¿Qué ha dicho el creador de Facebook?
Durante una entrevista que tuvo con el periódico The New York Times, Mark Zuckerberg aceptó que tuvo conocimiento de esta apropiación y le pidió a la consultora que borre los datos, ante lo cual estos le enviaron una certificación formal testificando que ya no los tenían. Tres años después del altercado se conoce que esto no fue así.
"Nos dieron una certificación formal y legal, y parece que todo fue falso. Debimos haberles pedido una prueba de que habían borrado los datos” - indicó Zuckerberg.
La crítica por parte de las autoridades de Estados Unidos y los propios usuarios se sostiene en ¿Por qué Facebook nunca les notificó que sus datos habían sido obtenidos por un grupo de estrategas políticos y que, ante ello, tomarían las medidas legales correspondientes para evitar la utilización de los mismos? Mark no pidió perdón por mantener todo este asunto en secreto durante tres años.
Al contrario, en un principio Zuckerberg se defendió señalando que en realidad fueron los propios usuarios quienes aceptaron los términos y condiciones que permitían a la aplicación acceder a sus datos personales y al de sus amigos. Sin embargo, ya de por sí al estar pasando esta información a Cambridge Analytica estaba quebrando su política de privacidad.
Todo ello generó una serie de dudas y alarmas correspondientes a qué tanto Facebook protege la privacidad de sus usuarios. Ante ello, luego de un silencio de 5 días, por fin Zuckerberg manifestó ante diversos medios de comunicación sus disculpas ante la filtración de información, admitiendo sus errores y anunciando nuevas medidas de protección de información que estarían implementando en los próximos días.
"Tenemos una responsabilidad: proteger sus datos. Si no lo logramos, no los merecemos. Es posible que hayas escuchado acerca de una aplicación de prueba construida por un investigador universitario que filtró datos de Facebook de millones de personas en 2014. Esto fue un abuso de confianza, y lamento que no hayamos hecho más en ese momento.", escribió en un mensaje publicado en varios diarios ingleses.
¿Cómo respondió Cambridge Analytica?
La consultora negó haber cometido algún tipo de irregularidad que atente contra la privacidad de los usuarios e incluso alegó que eliminó los datos recibidos por Kogan. Sin embargo, esta última semana la emisora británica Channel 4 News mostró, a través de una cámara oculta, al gerente general de la consultora, actualmente suspendido, Alexander Nix, jactándose de varias acciones ilícitas que estaba realizando la compañía.
En este reportaje, Nix admitió que la firma manejaba todos los datos, el análisis y la determinación de la campaña. Asimismo, indicó que “enviaba los correos electrónicos con un mando automático de autodestrucción para dificultar su posible rastreo. “No hay pruebas ni rastro documental de nada” – indicó.
¿Consecuencias?
Las acciones de Facebook cayeron alrededor de un 8% desde que se dio a conocer la noticia. Esto representa una pérdida de alrededor 46.000 millones de dólares en el valor de mercado de la compañía.
Del mismo modo, la reputación de la famosa red social está en juego ante la pérdida de confianza de miles de usuarios que confiaban que se respetaban los principios básicos de su privacidad.
Algunas recomendaciones:
Especialistas recomiendan a los usuarios que antes que le autoricen a una aplicación que pueda acceder a sus datos, primero lean atentamente los términos y condiciones que necesita para funcionar. Esto debido a que algunas solicitan acceso innecesario a datos personales como la lista de amigos o incluso las publicaciones y fotos del muro, información que en realidad habría que sospechar para qué fines podrían ser utilizadas.
Asimismo, expertos también recomiendan a los usuarios que cuando estén navegando desde otra computadora se acostumbren a usar el modo “privado” o “incógnito” del navegador de Internet y únicamente acceden a sitios web cuyas direcciones comiencen con las siglas “https”.