DIABETES
Es una enfermedad en la que el cuerpo deja de producir insulina (diabetes tipo I), o no lo produce en cantidad suficiente para convertir los alimentos en energía (diabetes tipo II) por lo tanto el organismo no puede almacenar el azúcar o glucosa que es su principal fuente de energía. Menos de 100 mg/dl de glicemia en ayuno es normal, de 101 a 125 mg/dl es prediabetes y si es mayor o igual a 126 mg/dl es diabetes. La diabetes tipo I se presenta generalmente en los niños y adolescentes mientras que la de tipo II o diabetes del adulto es diez veces más frecuente y tiene factores genéticos
En Latinoamérica es una de las primeras causas de muerte y en el mundo 371 millones de personas sufren de diabetes y la mitad desconocen que la padecen. Entre las complicaciones están los problemas de visión ocurridos por las enfermedades vasculares, problemas cardiacos, trastornos óseos y articulares. A largo plazo se incluyen problemas con la piel, en el aparato digestivo, disfunción sexual, problemas en los riñones, dientes y encías.
MEDIDAS NECESARIAS
La medida más importante es el control del sobrepeso y obesidad, con mejoras en la dieta y en la actividad física, también se requiere que el sector de la salud llegue a la población con educación nutricional para que el público conozca el valor calórico de los distintos alimentos. También se debe controlar la publicidad que induce a consumir comida chatarra y los refrescos azucarados especialmente en los niños, ya que se prevé que quienes nacieron después del 2010 la desarrollarán según el Centro de Diabetes de Boston, EE.UU.
NUEVO SIGNO VITAL
Para saber que la diabetes está controlada no basta con medir el azúcar en casa, es necesario pruebas de laboratorio de hemoglobina glicosilada A1C, junto con controles de presión arterial y de colesterol. También es importante que el médico escriba de forma clara su receta y que se asegure que el paciente ha entendido toda su prescripción, haciendo que diga con sus propias palabras lo que ha comprendido. La familia también se debe involucrar ya que un paciente diabético sufre de depresión, ansiedad y estrés y para ellos es muy reconfortante que los escuchen, entiendan o ayuden con su dieta, horario de medicamentos o ejercicios.